En el prólogo de Los miserables (1862), Victor Hugo denuncia explícitamente la tesis que lo inspirara: revelar la “condenación social” producto de las leyes y costumbres, y bosquejar un cuadro de los tres grandes problemas del pueblo: “la degradación del hombre por el proletariado, la decadencia de la mujer por el hambre y la atrofia del niño por la ignorancia”. Y la obra concluye con estas palabras: “…mientras haya en la tierra ignorancia y miseria, libros como éste podrán no ser inútiles”.
Traducción de Luis Echávarri
Colección: Grandes Clásicos
ISBN:
978-950-03-9578-6
Páginas:
1184
15 x 23
Tapa blanda con solapas