El poeta cubano Nicolás Guillén (1902-1989) recibió, con un libro inicial, el espaldarazo de Miguel de Unamuno, que se sintió deslumbrado, como poeta y lingüista, según confesó en su carta laudatoria. Desde entonces, con West Indies Ltd. (1934), Cantos para soldados y sones para turistas (1937); España, poema en cuatro angustias y una esperanza (1938) y este El son entero se situó, con una frescura rítmica inimitable, entre los grandes poetas de la lengua española.
El son entero
Cantos para soldados y sones para turistas