La bibliografía acumulada sobre Napoleón puede ocupar bibliotecas enteras. Desde los estudios eruditos hasta las variaciones imaginativas, pasando por la documentación diplomática. Toda suerte de escritos se han aplicado en torno a la figura del célebre corso, sin embargo, este libro de Octave Aubry no es una pieza más en el interminable catálogo: es una obra verdaderamente importante según lo corroboran la multitud de comentarios unánimemente elogiosos que le han dispensado en Francia. En sus páginas, Napoleón está analizado día a día, no exteriormente, sino en su fuero íntimo, en el secreto de su vida cotidiana. No es el héroe, sino el hombre quien late aquí con singular autenticidad. Octave Aubry aparta del lector el prodigioso andamiaje documental en el que basa su texto, y consigue presentar un Napoleón insospechado. Echando mano del género novelesco, el autor dota de encanto al género biográfico.
Este libro se cierra con un cuadro cronológico ─un “historama”─, en el que cada episodio biográfico aparece en concomitancia con los hechos políticos, culturales y sociales más sobresalientes que tuvieron lugar simultáneamente en todo el mundo. Ello permite ubicar al biografiado en su lugar y su tiempo, además de deparar sorpresas al lector más avezado…