La batracomiomaquia (batalla de los ratones y las ranas) agradó muchos a los antiguos y a los modernos: entre otros, a Leopardi, que la tradujo varias veces. Hoy se admiran la sencillez y la espontaneidad de la parodia. Genaro Alenda es el autor de la agradable traducción en verso.
Los Himnos homéricos están dedicados a las divinidades, cuyas gestas relatan. Los himnos tuvieron una amplia difusión: en ellos se inspiraron Calímaco en la época helenística, y Cleantes, el filósofo estoico. La traducción que damos de los Himnos homéricos es del distinguido humanista catalán Luis Segalá y Estalella, traductor también de La Ilíada y de La Odisea.