Paul Valéry, nacido en Sète en 1871 y muerto en París en 1945, y cuyos orígenes poéticos datan de fines de siglo XIX, recién en 1917 publicó un poema de quinientos versos (La Jeune Parque), que súbitamente lo convirtió en celebridad, a tal punto que fue consagrado en aquel momento como el primer poeta francés.
Sus títulos más significativos son: la colección de poemas Charmes, los diálogos Eupalinos o el arquitecto y El alma y la danza (ya publicados por Losada), junto con pequeños libritos de pensamientos, reflexiones y aforismos. Ocupan un lugar de preferencia su ensayo Miradas al mundo actual y los cinco volúmenes de misceláneas denominados Variété.
Mi Fausto (Esbozos) —así llamó el autor a la obra que aquí presentamos— está compuesta de dos partes: “Lust, la Señorita de Cristal” y “El solitario: o Las maldiciones del Universo”, en las que Valéry desarrolla su peculiar versión del conocido mito.