El autor instaura como inspiradora del poemario –de tema enteramente amoroso– a su musa, y lo hace con las palabras de Shelley con que lo presenta: “Tú Maravilla, y tú Belleza, y tú Terror”.
El autor instaura como inspiradora del poemario –de tema enteramente amoroso– a su musa, y lo hace con las palabras de Shelley con que lo presenta: “Tú Maravilla, y tú Belleza, y tú Terror”.